El presidente Felipe Calderón inició oficialmente un nuevo ciclo escolar bajo una reforma integral de la educación básica, hecha por decreto, sin ningún tipo de discusión parlamentaria o consulta popular. Al respecto, el vocero de trabajadores de educación mexicano, César Mendoza, lamentó que la única herramienta que tiene el pueblo para revertir tal decisión es salir a las calles en protesta.
El gobierno mexicano mediante un decreto omitió a partir de este lunes la historia de la colonización española en sus libros escolares, además los textos de matemáticas llegaron con errores de base, lo que fue calificado por el vocero de trabajadores de educación mexicano, César Mendoza como un intento de conseguir "que la gente no piense".
Fue un decreto a partir de los planes y programas de estudio mandados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), por el Banco Mundial, y por la Organización Mundial del Comercio (OMC), según detalla el especialista.
"Es un cambio no sólo en los libros de texto, es un cambio en el enfoque de la educación", que está basado en "un modelo de competencia (...)que no tiene nada que ver con los saberes de la humanidad".
La base de la llamada educación por competencia "quiere gente dócil, gente que no conozca su pasado, para que no pueda luchar por un futuro de libertad gente que no piense, gente que sólo sepa seguir instrucciones".
"Quieren convertir al homo sapiens, en el homo hábilis", manifestó preocupado el intelectual.
"Esto es lo que quiere el imperio, que la gente sólo sepa soldar los números que indican en la maquiladora", denunció.
Este lunes, México inició clases bajo un decreto del presidente Felipe Calderón, implantado sin consulta, que reforma a la educación con la extracción de los citados contenidos.
"No es un cambio a la ley, es un decreto presidencial" y en esos caos "nunca se debate ni con los actores de la educación ni con los padres de familia", indicó Mendoza
Contrariamente, en Venezuela, la Asamblea Nacional de Venezuela aprobó por unanimidad la nueva Ley Orgánica de Educación (LOE), luego de recibir documentos en los que representantes de la educación católica venezolana, sectores indígenas y voceros de la educación privada, hicieron sus respectivas observaciones.
Mientras que en el caso mexicano "fundamentalmente los argumentos que están esgrimiendo es que esto no es necesario", es decir que "la historia debe de ser para demostrar que somos un país capitalista desde el inicio, que somos un país sin cultura antigua, sin raíces, para quitarnos todo lo que somos como mexicanos".
Es oportuno referir que el fallecido escritor venezolano, Guillermo Loreto Mata, en su obra "El libro de las preguntas", se preguntó: ¿Cuántos serán los interesados en que los demás no piensen?
En medio de una época polémica alrededor de la reforma educativa, el 75 por ciento de los aspirantes a maestros de la Secretaria de Educación publica de México reprobó el examen de admisión. Al respecto, Mendoza aclaró que "no es que los maestros de México, como dicen los medios oficiales, no sirvan, lo que pasa es que el examen es estandarizado".
"En lugar de aumentar la calidad de la educación (...) se está terminando con el poco avance que teníamos en esta materia", denunció.
