Por las fuertes lluvias que azotan a la parte sur y metropolitana del país ya han perecido 53 personas. Del total 20 han muerto en la turística Ilha Grande, a unos 150 km al sur de Río de Janeiro (sureste), donde un alud de lodo destrozó la posada Sankay. Se conoce que unas 40 personas estaban celebrando el Año Nuevo en este hotel.
El número de fallecidos en Brasil a causa de las fuertes lluvias que azotan al país desde hace varias semanas se elevó este sábado a 53, de los cuales 20 fueron víctimas de un alud de tierra en la turística Ilha Grande, a unos 150 km al sur de Río de Janeiro (sureste). El fenómeno destrozó el pequeño hotel Sankay, ubicado en la playa y varias viviendas.
Ilha Grande es una isla de pescadores y representa uno de los destinos preferidos por los ecoturistas.Hasta el momento se desconoce si entre las víctimas hay huéspedes del hotel, según el reporte de los servicios de protección civil brasileños.
Lo cierto es que se tienen registros de que unas 40 personas celebraron el Año Nuevo en Sankay y según versiones aún no confirmadas los dueños del establecimiento habrían sobrevivido pero su hija falleció.
En las labores de rescate están ayudando más de 100 voluntarios pero la tarea se ha tornado difícil pues a la zona sólo se puede llegar vía acuática.
La región en torno a Río de Janeiro lleva días azotada por fuertes lluvias que, según las previsiones, continuarán.
Ya el viernes, cuando se conoció de la tragedia en Sankay, el vicegobernador del Estado de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezáo, describió el escenario como desolador.
"Es un escenario desolador (...) una montaña de piedras y árboles sobre varias casas", describió para una radio local .
Según Pezáo, la posada sufrió daños en una parte de sus instalaciones pero quedaron enterradas varias otras casas que fueron alquiladas para celebrar el fin del año.Por su parte, el comandante de los bomberos de Angra dos Reis, ciudad continental situada a pocos kilómetros de la isla, Pedro Machado, confirmó también el viernes a estaciones locales que además de los diez fallecidos han retirado del lugar del incidente al menos a cinco heridos.
Machado indicó que el deslizamiento se suscitó a las 04H30 hora local (06H30 GMT) y que afectó a quienes descansaban en la Posada Sankai, situada en la playa del Bananal, una zona donde el acceso sólo es posible por mar.
